Hoy es un día bonito, ha salido el sol y resplandecientemente alegra los corazones limeños o bueno al menos así lo siento yo y es un buen momento para escribir :).
No todos los días uno se levanta con el pie derecho pero el tiempo que voy viviendo me ha enseñado que siempre, cada día, es provechoso para poder realizar cualquier cosa.
El sábado pasado un profesor mencionó en su clase que cada día que vivimos es un día menos que nos queda para vivir... shut up! sí es así pero es mejor verlo desde el otro lado, un día más para gozar, vivir, disfrutar, aprender, etc. etc. etc.
Y es que es así, hay algunas veces que sentimos que estamos viviendo por vivir, sin sentido alguno y sentimos un vacío, unas ganas de llorar sin alguna razón y probablemente eso se deba a que en realidad no le estemos encontrando el sentido a la vida. Hay muchas cosas importantes en la vida pero ello no significa que a todas esas les asignemos la misma importancia, depende de nosotros asignar tiempo y espacio a cada cosa y tener siempre aunque sea mínimo un espacio para nosotros mismos. Encontrarnos y ser felices con nosotros mismos es la base para la felicidad lo demás viene por añadidura...
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